"En estos dos libros hay algo que no abunda en los poetas jóvenes: misterio y necesidad de
explorar dentro de ese misterio. Cuando un libro se deja leer varias veces hacia adelante y hacia
atrás es porque funciona como un laberinto donde uno se pierde. Y creo que esa es la esencia
de la poesía: perdernos y obligarnos a recorrer una y otra vez ese laberinto del misterio.
Aunque detesto hacer las veces de oráculo. Es preferible que el poeta ignore toda esta palabrería
racional y continúe como un loco, como una loca, inmersa en las oscuras cavernas, a ciegas."
Todavía no probé leerme para adelante y para atrás, pero me interesa el juego. Si llegara a leerlo de arriba para abajo y de abajo para arriba sería aún mejor. Algo así como un bailecito con los ojos.

Pedro Juan es un narrador de la gran flauta. Digo de la gran flauta para ilustrar su magnificencia sin usar improperios, que es una forma de decir fantástico.
Si te interesa leer más sobre él, visitá su blog: http://pedrojuangutierrez.blogspot.com/.
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